A Boquete llegamos después de haber estado en Bocas del Toro con la imagen de una zona residencial, tranquila, fresca y limpia, y eso fue precisamente lo que nos encontramos. Boquete es una zona que acoge a muchos expatriados jubilados (especialmente norteamericanos) que encontraron en este pueblo de montaña panameño el lugar ideal para pasar sus últimos años. Sinceramente, no creo que sea para tanto, podría enumerar 20 lugares mejores ahora mismo, pero cada uno es libre de gastar sus cientos de miles de dólares de la manera que le venga en gana.
El camino desde Bocas hasta Boquete, a pesar de que en línea recta apenas supone una treintena de kilómetros, se convierte en una verdadera pesadilla porque en medio está el Parque Nacional Amistad que comparten Panamá y Costa Rica. Básicamente, el traslado desde uno a otro lugar supone tomar en Bocas una lancha o el ferry, de allí un taxi que te acerque a la estación de autobuses y pasarte unas 5 horas en un autobús que te llevará a David y empalmar con un autobús tipo «autobús escolar estadounidense» (¡igualito que en Los Simpsons!) que en unos 45 minutos une David y Boquete. Además, como nuestro hostel se encontraba un poco alejado de la población y era de noche cuando llegamos, tuvimos que pagar un taxi (luego descubrimos que hay unas furgonetas que puedes parar y te llevan por la mitad de precio, que en todo caso no es muy caro).
Dónde dormir en Boquete
El hostel Nomba, que así se llamaba nuestro alojamiento, lo habíamos encontrado en la web Home Away y era el lugar más barato de todo Boquete (10$ pp). Es un hostel bastante apañado, de los típicos hostels con literas y zonas comunes, pero sin cocina. Eso sí, tenía una cocinera que hacía unos pancakes buenísimos y sin límite, buffet libre. El hostel lo llevaban una pareja de argentinos muy simpáticos que imagino que estaban de paso, así que probablemente ahora habrá otras personas gestionándolo. El único problema de este hostel es su ubicación, fuera del casco urbano, lo cual le resta cierta accesibilidad, aunque a cambio consigues mayor tranquilidad si cabe.
Si tuviera que elegir volvería a este hostel, por dos motivos: los desayunos y el precio. Sin embargo, si el precio fuera el mismo que en uno de los hostels del pueblo, elegiría el del pueblo para poder tener más opciones dónde cenar y encontrar algo más de vidilla. Para cenar solo hay un restaurante cerca del hostel Nomba, un pequeño restaurante tipo fast-food (a la panameña) que se llama Stop and Go y que no está mal si lo encuentras abierto.
Que hacer y que ver en Boquete
La principal atracción de Boquete son sus senderos y sus montañas, en especial el volcán Baru. Conocimos bastante gente que había hecho la caminata y en algo coincidían: es dura y hace frío. Si en Bocas del Toro tuvimos casi todo el tiempo un calor insoportable, en Boquete, abajo, en el pueblo, por las noches nos abrigábamos y todos los días nos llovió, así que imaginad lo que puedes ser subir al volcán: llevad ropa de abrigo, buen calzado y no lo hagáis si no estáis en forma. En otra cosa en la que había bastante consenso es que no valía la pena. No por el camino, del que todos hablaban bien, pero sí por el hecho de llegar a lo alto del volcán y darte cuenta que está todo lleno de antenas de televisión y que se puede subir por una carretera. Para ver la naturaleza solo hay que darse una vuelta por Boquete.
Otra cosa típica que «hay que ver» en Boquete son las plantaciones de café. Ni que decir tiene que sí o sí vas a ver plantaciones de café con solo salir a pasear por la carretera que sale del pueblo y se adentra en el Parque. No pagues por ir a verlas, simplemente camina un poco o toma un taxi hasta el inicio de los senderos.
A todo esto, todos los senderos sin excepción tienen una caseta de vigilancia y te cobran una entrada por caminar por allí. Nosotros subimos caminando desde el hostel hasta la entrada a los senderos y nos negamos a pagar por visitar la naturaleza. Es uno de nuestros principios irrenunciables en un viaje. Si quieres pagar, paga, si no quieres hacerlo y te limitas a visitar la zona como nosotros, pasea por las zonas abiertas, si quieres colarte búscate la vida que no es nada complicado. Lo que sí te recomiendo es que tomes un bus hasta la puerta de entrada al parque y empieces a andar allí.
Por último, ya fuera de Boquete hay dos lugares que merecen una visita y así lo programamos: el mini cañón de Gualaca y las aguas termales de Caldera. La idea era visitar los dos lugares y para ello nos levantamos pronto el último día y nos dirigimos a David dónde tomamos un bus a Gualaca. Nos habíamos informado y existía un bus que unía Gualaca y Caldera, así que dedicaríamos la mañana al mini-cañón de Gualaca (los Cangilones) y la tarde a las aguas termales de Caldera desde dónde hay un bus hacía David. Sin embargo, hizo tanta calor, fue un día tan horriblemente caluroso que pensamos que sería una locura bañarnos en aguas termales. Decidimos finalmente pasar el día entero a remojo en el mini-cañón (agua fresca, pero no helada). Por cierto, si vas en transporte público, cuando subas al bus avisa al conductor para que te deje en Gualaca en la carretera que va a los Cangilones. Es un pueblo pequeño, pero si te deja y te indica cómo ir mucho mejor (son unos 15 minutos andando). En principio no se cobra entrada, pero hay unos carteles amenazando de ello. Nosotros entramos nada más llegar al parking por una entrada secundaria que hay y nadie nos pidió nada.
Dónde comer en Boquete
Sin lugar a dudas, el mejor lugar es el restaurante El Sabrosón, pero cuidado, hay dos sabrosones y por alguna razón, el bueno es el que está subiendo hacía los senderos, no el de la plaza. El local hace honor a su nombre y está todo buenísimo y muy barato.
En la ciudad hay más restaurantes, algunos más lujosos (y caros), pero creo que no hay ninguna excusa posible para no comer en El Sabrosón. En la ciudad hay también un supermercado bastante grande por si quieres cocinarte tu propia comida.
Dia 8:
Taxi a la estación de autobuses de Almirante: 2 x $0.75
Bus Almirante-David: 2 x $8.5
Hamburguesa (parada a mediodía del bus): $2
Palmera de chocolate (estación de David): $0.75
Bus escolar David-Boquete: 2 x $1.75
Taxi al hostel (desde el centro de Boquete): 2 x $1
Cena para 2 en restaurante Stop and go: $8
Día 9:
Furgoneta desde la montaña al pueblo: 2 x $1.5
Comida El Sabrosón para 2 personas: $7.5
Supermercado (comida para San Blas): $10.9
Cena El Sabrosón: $8.4
Furgo al hostel: 2 x $0.75
Día 10:
Bus Boquete-David: 2 x $1.75
Consigna (dejamos las mochilas para visitar Los Cangilones): $1 + $1.5
Bus David-Gualaca: 2 x $1.5
Comida (en Gualaca): $8.2
Bus Gualaca-David: 2 x $1.5
Cena (en la misma estación de David): $5.4
Bus David-Panamá: 2 x $18.5
2 noches en Hostel Nomba: 2 x 2 x $10
TOTAL BOQUETE ~168.65 dólares