Hace ya un mes que regresamos de Indonesia y ya era hora que volviera a escribir algo en este blog! En breve reemprenderé la tarea de escribir acerca de Islandia e Indonesia. En realidad todos los artículos tanto de Islandia como de Indonesia están ya escritos, pero falta añadir las fotos, enlaces, comprobar algunos datos… Poco a poco.
En caso es que hoy quiero hablar de Indonesia. Como ya conté, la planificación fue complicada por la gran cantidad de opciones disponibles. Indonesia es un país enorme con miles de islas y malas conexiones entre ellas. Nuestra elección finalmente fue una ruta muy convencional, pasando por Tana Toraja, Komodo, Lombok, Gili, Bali y lo esencial de Java. Sin embargo y tras aterrizar en el país, los cambios se sucedieron y nos saltamos gran parte de lo previsto dejando el viaje más o menos así:
- Tana Toraja: ruta norte y sur en moto
- Pantai Bira: 3 días de playa disfrutando del snorkeling
- Labuan Bajo: solo visitamos la isla de Rinca para ver los dragones de Komodo
- Gili Trawangan: pasamos mucho más tiempo del previsto por culpa de unas tortugas marinas que no nos dejaban irnos
- Bali: estuvimos en Ubud y Kuta, pero recorrimos todos los alrededores en moto
El porqué de este cambio lo explicaré más abajo cuando explique lo que no nos gustó de Indonesia
Transportes en Indonesia
Los transportes por tierra no son tan malos como se podría pensar en un principio. Por tierra los autobuses y taxis van lentos, pero suelen ser puntuales. La comodidad tampoco está nada mal, aunque mis baremos incluyen países africanos, claro. Por ejemplos los autobuses nocturnos de Makasar a Tana Toraja o los de Labuan Bajo a Lombok son reclinables unos 30 grados lo cual te permite dormir más cómodamente que en un avión, pero menos que en un tren. Además el precio del transporte es muy ajustado.
Por aire no viajamos nada, solo los vuelos para llegar y para irnos desde Kuala Lumpur, pero vimos que en los paneles de información había más retrasos y cancelaciones de lo que solemos estar acostumbrados, pero tampoco era algo escandaloso. Por mar sí viajamos y solo tengo que decir que tuvimos un retraso de 4 días y que justo cuando nos largamos de Labuan Bajo se hundió un barco turístico y murieron dos españoles. Ese es el nivel. (Me explayaré más en la parte del retraso cuando publique el artículo sobre el viaje de Bira a Labuan Bajo).
Comida en Indonesia
Genial, fantástica. Sin duda, el país del sudeste asiático dónde mejor hemos comido. A diferencia de otros países de su entorno, aquí no es muy común la comida en la calle, por lo que casi siempre terminábamos sentándonos en un restaurante (algo más caro que comer en la calle, normalmente). Los precios ya los veréis cuando empecemos a publicar, pero básicamente comíamos los dos por unos 5 euros (a la carta y con bebidas no alcohólicas).
Se suele desayunar de manera espectacular en los hoteles: banana pancakes, ensaladas de frutas, etc. Para comer hay opciones que van desde el «plato del día» que sale por menos de 1 euro (normalmente comidas autóctonas como el Bakso) hasta comer en restaurantes «internacionales» (lo pongo entre comillas porque de internacional tienen solo la carta y la comida, los cocineros son locales y toda la comida tiene un cierto toque indonesio, como los espagueti carbonara que llevan su guindilla).
Alojamientos en Indonesia
Muy buenos. El precio base son 10 € por la habitación doble y, aunque alguna vez encontramos algo un poco más barato, creo que no vale la pena salirse de ese rango de precios. En esa categoría (la más baja) tienes habitaciones con desayuno muy limpios, aunque un poco viejos y desvencijados, pero aceptables. Eso en temporada hiper-alta como es el mes de agosto, en época de lluvias estoy seguro de que se pueden negociar por mucho menos.
Problemas que tuvimos en Indonesia
El principal problema que tuvimos en Indonesia fue llegar con la cámara rota. En el viaje a Islandia se llevó un golpe el objetivo y lo intentamos reparar de manera casera a última hora, pero no funcionó y nos dimos cuenta cuando ya estábamos en Kuala Lumpur. Así que las fotos que publicaremos son malas y pocas porque no teníamos más cámara que la del móvil. Por lo demás, ningún otro problema salvo el retraso del barco.
La sensación de seguridad en Indonesia es total. Ningún incidente relacionado con la seguridad en ningún lugar a pesar de que nos advirtieron de que la policía en Bali era muy corrupta y que solían haber estafas en el aeropuerto de Tuban.
Lo que no nos gustó de Indonesia
Solo hubo una cosa que no nos gustara de Indonesia. Dudaba si ponerlo en la parte de problemas o aquí, pero creo que es más algo más propio de gustos que de problemas debido a nuestra forma de viajar y entender los viajes.
En Indonesia tuvimos la misma sensación que en Kenia: eramos percibidos como dólares con patas por todas las personas que trabajan entorno al turismo directa o indirectamente (agencias de viajes, taxis, hoteles, etc). Es una sensación que a mi personalmente me repugna porque es la prostitución del espíritu del viaje. El culpable de eso es la irrupción de la industria turística propiciada por la llegada de hordas de turistas australianos que sueltan billetes verdes a velocidades de vértigo. El resultado es que allá dónde vas te quieren cobrar, te tratan de sacar un extra de dinero, se te acercan para hablar sólo aquellos que quieren sacarte algo, etc. Para prevenir esto tienes dos opciones: o te alejas de las principales rutas turísticas o te metes en las zonas invadidas dónde hay más extranjeros que locales y dónde ya están acostumbrados a tener extranjeros (Kuta, Gili). Es una lástima que un país maravilloso con una gente fantástica se corrompa de esta manera. Podría haber sustituido a Tailandia como nuestro país más recomendado para viajar, pero este hecho le resta muchos puntos.
Lo que sí nos gustó de Indonesia
Buffff… ¿qué podría yo destacar? Nos gustó todo lo demás. Nos gusto la comida, nos gustó el clima (en agosto), nos gustó la fauna marina, nos gustaron los paisajes… todo. Es un país enorme y muy diverso.
Balance final del viaje a Indonesia
A la pregunta «¿repetirías el mismo viaje?» contestaría «ahora mismo». Luego ya reflexionando un poco, cambiaría algunas cosas, pequeños detalles, pero repetiría encantado este viaje y es más, sé seguro que a Indonesia volveremos. Todavía nos quedan muchas islas por visitar: Borneo con su selva y sus orangutanes, Sumatra con todo su misterio, las islas Mentawai y Papua con sus indígenas, las Banda con su vida marina….
Pues sí, la verdad es que yo también me mosqueo más de una vez, cuando veo que siempre me quieren cobrar un poco (o mucho) de más. Por eso (y para pasar el rato), un día me hice unas camisetas (media docena, aquí con baratas) con la leyenda «Saya bukan orang kaya (jangan minta lebih» que quiere decir «no soy rico (no me pidas de más)».
La verdad es que, por mucho que les digas que no eres rico (cuando les digo eso, me miran como diciendo, si, si, a mi no me cuentes milongas), ellos nunca se lo creen. Saben, que el solo hecho de que te hayas gastado 10, 12, o 15 millones de rupias (muchos de ellos, no lo ganan en un año), para venir hasta aquí, solo ese hecho, para ellos, ya te convierte en «bule kaya» (blanco rico).
Vivo entre Barcelona y Yakarta, y cuando estoy en la capital de Indonesia, hago algunas escapadas a Bali, sin duda el lugar donde uno más se siente «euro andante».
Pero también hay que decir, que a cambio de todo esto, la gente te saluda, te sonríe y en resumen te mima para que te sientas a gusto con ellos. Por esto, me gusta venir a Indonesia, pues, en Barcelona soy un ente totalmente anónimo, y aquí no (aunque me cueste un poco de dinero).
Habéis escrito un buen post, perdonar por el tochillo
Saludos