Es difícil encontrar películas de estreno cuya temática esté relacionada con los viajes. Sin embargo, es cada vez más habitual encontrarnos con películas que recrean o se desarrollan en algún lugar que ayuda a los viajeros a evocar alguno de los viajes ya realizados o a ir preparándose para lo que se va a encontrar en un futuro viaje. La batalla de Hadiza es una de estas películas. Aunque está ambientada en la actual guerra de Irak, fue rodada íntegramente en Jerash (Jordania), por lo que puede ser de utilidad a todos los viajeros que vayan a la zona para hacerse una idea de como son las calles, las gentes, los usos y costumbres… A mi me recordó mucho a Egipto, la gente viste casi igual y las viviendas y las calles son tal cual las de ese país.
La película no tiene desperdicio. A parte de poder observar la realidad de un país que para muchos es ajeno y muy lejano, permite también observar el choque entre las fuerzas invasoras americanas y la población local. No sólo se puede observar la diferencia en cuanto a potencial económico y armamentístico (bombas caseras frente a misiles guiados a distancia), sino que también se puede ver el choque cultural y religioso brutal que desencadena una espiral de violencia.
Y sin duda, otro de los puntos fuertes de la película es algo que mucha de la gente que acudió al preestreno no entendió: la canción Lies, lies, lies de Ministry. Recomiendo a todo el mundo que se quede hasta el final de los créditos para entender la película en todo su esplendor (aunque la tesis principal se entiende mucho antes). Por cierto, la película es subtitulada (parece ser que como la mitad de los diálogos era en inglés y la otra mitad en árabe, hubiera sido complicado hacer un buen doblaje) y se estrenará este fin de semana.