Si unimos 3 factores: volar en noviembre, elegir rutas económicas y la guerra de precios que tienen actualmente las compañías aéreas, obtenemos el coctel perfecto para diseñar una vuelta al mundo a precio de saldo.
Ya os contamos hace un tiempo cómo hacer una vuelta al mundo mileurista pasando por algunos lugares especialmente interesantes como Bali, Hawai, etc. pero ahora os vamos a contar cómo hacer una vuelta al mundo minimalista, con el precio mínimo posible para poder decir «¡he dado una vuelta al mundo!». Este recorrido todavía se podría apretar más e incluso bajar hasta acercarse a los 700 euros, pero entonces tendríamos poco tiempo para visitar cada lugar.
Y, por supuesto, esto solo son los precios de los vuelos, luego habría que añadir alojamiento, comida, transporte local y visados.
Trayecto de la vuelta al mundo por 700 euros
15 de noviembre Madrid – Dubai …….. 103 euros
19 de noviembre Dubai – Manila ……… 72 euros (300 AED)
29 de noviembre Manila – Shangai ……. 52 euros
6 de diciembre Shangai – Seattle ………. 243 euros
9 de diciembre Seattle – Los Angeles …. 43 euros
12 de diciembre Los Angeles – Madrid .. 220 euros
Total: 103+72+52+243+43+220 = 733 euros
Duración en total del viaje: 28 días
Cómo reservar esta vuelta al mundo
Primer tramo: Madrid – Dubai en SkyScanner
Segundo tramo: Dubai – Manila directamente en la web de Cebu Pacific (ojo, este precio no incluye extras)
Tercer tramo: Manila – Shangai en SkyScanner
Cuarto tramo: Shangai – Seattle en SkyScanner (actualmente la manera más económica de cruzar el pacífico es volar desde China a EEUU)
Quinto tramo: Seattle – Los Angeles en SkyScanner
Sexto tramo: Los Ángeles – Madrid en SkyScanner
Conclusión
Se puede volar alrededor del mundo por muy poco dinero. Sin embargo, este no es el trayecto alrededor del mundo que yo haría. Quizás si solo tuviera un mes de vacaciones podría llegar a planteármelo, pero sin duda, con tiempo, se podría hacer una vuelta al mundo mucho más completa por un precio similar.
Otra opción que podría bajar el precio casi 100 euros sería hacer una especie de vuelta al mundo open jaw en la que no coincidieran los aeropuertos de llegada y salida para hacer determinados recorridos por carretera. Por ejemplo, en esta vuelta al mundo, se me ocurre que al llegar a Seattle sería estupendo disponer de un par de semanas en EEUU y recorrer toda la costa oeste hasta Los Ángeles, ahorrándonos el vuelo de conexión (aunque gastaríamos ese dinero en autobuses públicos o un coche de alquiler, claro). Es más, incluso podríamos salir por Nueva York recorriendo medio país por el mismo precio, pero con más tiempo.